en la paradoja se encuentra la verdad
El ser humano es el animal hegemónico por excelencia debido a su capacidad innata de adaptación, quizás por eso todas nuestras relaciones de posibilidad con el mundo se ven infinitamente mediadas por nuestra adaptación. La convivencia nace en el seno de adaptarnos a las costumbres del otro del mismo modo que la escritura sólo se puede dar cuando el escritor se adapta a las necesidades de la obra, un ente vivo en sí mismo, que está escribiendo. Por eso Los Millones de Santiago Lorenzo, la primera referencia del autor y de Libros Mondo Brutto, es tan fantástico.
En Marzo de 1986 a Francisco Garcia le tocan doscientos millones de pesetas en la Lotería Primitiva, el problema es que no puede cobrar el premio por no tener DNI; no tiene DNI por ser del GRAPO. Se podría resumir muy acertadamente toda la novela en el epígrafe anterior sino temiéramos dejar fuera lo que hace realmente increíble la novela: sus personajes. Siguiendo la estela solondziana de Lorenzo nos encontramos conque Francisco vive una vida miserable siendo una célula operativa del GRAPO. Trabaja por cuatro duros y su vida se le escapa entre los dedos mientras bebe trifásicos en el bar Coyfer esperando un contacto de sus superiores que jamás llega. Todo cambia cuando conoce a Primitiva, una joven periodista que le dará un vuelco a su corazón y le endulzará su vida, hasta el punto de hacerle ver la posibilidad de cambiar de vida. Pero no nos engañemos, aquí no hay cabida para historias de amor, es una novela donde hay una historia de entendimiento que precipitará en igual medida tanto el amor como la fortuna y la desgracia.