Los fans de Halo nos sentimos abandonados después de que Bungie afirmara que ya no continuarían perpetrando la saga. Aun cuando la saga ya abarca prácticamente media docenas de juegos, novelas, su propia serie de cortos de anime y merchandising de todo pelaje los fans necesitamos un resquicio más. Y los fans son los que nos lo dan. Así se gesta el proyecto de videojuego indie conocido como Halo: Out Whit A Whimper.
Aunque solo podemos catar de momento una demo nos encontramos ante una excelente recreación del mundo Halo a todos los niveles. Personalizaremos a nuestro personaje como nos plazca, lo cual no aportará beneficios especiales más allá de los estéticos, para luego lanzarlo en uno de los tres escenarios donde tendremos que enfrentarnos a las hordas de enemigos que acechan. Su estética 2D hace uso de unos preciosista colores brillantes gracias a una buena iluminación de lo cual ha sido siempre adalid la saga Halo. Desde el más insignificante y persistente de los enemigos hasta el más excepcional de los vehículos están mimados hasta el límite, son perfectas recreaciones en miniatura de sus homónimos de consola de última generación. Al igual que la música con composiciones originales que respetan el espíritu de la saga. Y sí, para rematar, la jugabilidad está a la altura con un estilo que mezcla el estilo frenético de los 2D de un Contra y todas las características de los Halo. Durante la partida necesitaremos cambiar de armas al agotar la munición, utilizar racionalmente nuestras limitadas granadas y saber cuando cubrirnos para recuperar vida. Todo esto y mucho más para poder conseguir las ansiadas medallas y cráneos que tan bien conocemos todos, antes de atrevernos a si quiera soñar con el suicida modo Legendario.
Estamos pues ante un Halo por propio derecho tanto en forma como en espíritu. El trabajo detrás está hecho con un mimo y cuidado que ya querría para sí muchos profesionales del videojuego. Como ya dirían los Wu Ming el futuro de las narrativas contemporaneas pasarán necesariamente por la realización de un relato colectivo con el que crezca el relato junto con sus fans. Y esto es solo una demo, soñemos con hasta donde podrán llevarnos los voluntariosos fans que desean con fuerza que su universo viva siempre. Hasta donde podremos llevar nuestro universo.