En una relación es vital para su buen funcionamiento la confianza en el otro, ya que cuando se carece de ella las cosas tienden a torcerse. Esto es igual para la siempre dificil relación músico-oyente y es algo que parece que Doping Panda ha olvidado.
En su single, beat addiction, nos regalan un avance de su disco Decadence que nos hace esperar la vuelta a los mejores tiempos del grupo. Una canción con varias capas de percusiones, una guitarra afilada con una buena distorsión y un bajo que acompaña en una interesante histeria en clave jungle. La vuelta a sonidos más caribeños sumada al abrazo hacia el uso de unas flagrantes y excesivas percusiones les acerca a una suerte de D&B en clave indie, hiperbolizado y llevado al extremo de la densidad. Así conforman una pieza abigarrada, densa, donde tras cada capa se esconden otras dos de puro tribalismo electrónico. Cumplen con esto los sueños húmedos de los fans más acérrimos con una canción que consigue dar lo mejor del grupo. El problema es cuando escuchamos beat addiction ya en el disco.