Seguimos con el especial trayendo esta vez al caballero Dani Lain que nos hablará de Soul Reaver como buen conocedor de los videojuegos de PC que es.
Vampiros, los hay clásicos como Drácula, feos como Nosferatu, buenazos capaces de convertirse en feos con problemas sentimentales como Angel y ahora unos que brillan al sol. Hay decenas de vampiros que nos guste o no han conseguido fama mundial y pese a ello mi favorito sigue siendo casi un desconocido en su propio mundillo sangriento, me refiero a Raziel protagonista de Soul Reaver.
Raziel es la mano derecha de Kain, líder de los clanes vampíricos, con la peculiaridad de que estos vampiros evolucionan con el tiempo obteniendo nuevas habilidades. El juego nos sitúa en el momento en que Raziel se adelanta a su irascible líder desarrollando alas. La reacción de Kain es inmediata: mutilación de los nuevos miembros y posterior sacrificio en el abismo.
Comenzamos en el despertar siglos después y prácticamente descompuesto de nuestro héroe. Reanimado por Nosgoth, una deidad más que enigmática empeñada en que Kain y sus hijos, hermanos de Raziel, paguen por sus acciones. El mayor problema al que se enfrenta y a la vez su mejor ventaja es que ya no es ni una sombra de lo que fue. No puede permanecer en el plano real durante mucho tiempo y para mantenerse ya no necesita beber sangre, sino consumir almas absorbiendo de ellas las habilidades de su victima. La ventaja: ahora es capaz de viajar alternativamente por el plano real y el astral. Aunque este último es retorcido y muy distinto del real, por no hablar de que está plagado de almas hostiles lo cual hace que su visita no sea un camino de rosas.