Corres, saltas, caes sobre una tortuga voladora mientras esquivas los envites de un sol con cara cabreada y mientras caes armoniosamente sobre un bloque de piedra a la par que recoges una hoja que te convierte en una suerte de pseudo-mapache. Bienvenido a Super Mario Bros 3.
Con la misma historia de siempre, Bowser secuestrando a la princesa Peach, solo que esta vez aderezada por el hecho de tener que pasar por 7 mundos derrotando a los respectivos hijos de Bowser que han robado las varitas mágicas de los gobernantes de esos reinos nos encontramos según empezamos este juego. Aunque en lo argumental apenas encontramos una ligerisima evolución después de los dos Super Mario originales si que encontramos en estos una escusa para una nueva estructura, un mapeado donde se va moviendo Mario para elegir que fases acometer en cada momento dentro de unas lógicas acotaciones de linealidad. Ademas, no solo de fases vive Mario, encontraremos también minijuegos, tiendas de regalo y enemigos pululando por el mapa que nos darán mas vidas u objetos que utilizar, previa victoria, antes de adentrarnos en una nueva fase o que usar en el propio mapeado. ¿Pasarte la fase 2 y llegar a la tienda o directamente ir a la 3 e ir a la fortaleza?¿seguir intentando la fase que se te atraganta o utilizar un martillo, destrozar la roca y atajar por allí?, decisiones, decisiones.